El adjunto a la dirección técnica del Comité Nacional indicó que los colegiados deben erradicar "las risas y la confianza con los jugadores"
"El error se palpa... se huele, pero tenemos que abordarlo con coraje, y a la vez con templanza"
"Al árbitro no se le paga por ser simpático". Esta fue una de las frases pronunciadas por Luis Medina Cantalejo, adjunto a la dirección técnica del Comité Nacional de Árbitros en el transcurso de la conferencia pronunciada en la tarde del lunes, 6 de abril de 2015, en el teatro Guayre (Gáldar), dentro del ciclo de charlas de la vigésimo cuarta edición del Tagoror Clinic Internacional de Árbitros promovido por el Comité Técnico de Las Palmas. Su conferencia, que se caracterizó por la interactuación con los más de 300 asistentes y el visionado de diferentes vídeos, tuvo como título "La regla 18: el sentido común".
El ex árbitro internacional, que fue presentado por el presidente del CTA de Las Palmas Esteban Hernández Galván, comenzó su alocución exponiendo que "el árbitro no puede llegar a un partido con una cerilla en la mano con la intención de prender fuego".
Tras definir que el sentido común es la "facilidad que tienen la generalidad de las personas para juzgar de manera razonable", Medina Cantalejo indicó que "la labor del arbitraje no sólo es aplicar las Reglas de Juego, sino no perder el control del partido en sí y el propio autocontrol personal".
"El respeto se gana respetando. No confundamos esto con las risas, los gestos u otras acciones que estamos viendo en los últimos tiempos. Eso no les llevará a nungún sitio", indicó el formador de los árbitros de Segunda División "B".
Medina Cantalejo hizo especial hincapié en que los colegiados deben erradicar "las risas y la confianza" con los jugadores, argumentando que ellos "no son, ni van a ser nuestros amigos. Ni siquiera los entrenadores son amigos de los jugadores y eso que están en el mismo equipo y luchan por los mismos colores".
En relación a las situaciones de error que puede vivir un árbitro en un encuentro de fútbol, Medina expuso que "el error se palpa.. se huele, pero tenemos que abordarlo con coraje y, a la vez, con templanza". "El día que los jugadores se dirijan a nosotros para protestarnos una decisión, tenemos que plantarnos en el sitio y no retroceder".
"No estamos para aguantar humillaciones de nadie, ni para ponernos chulos, ni para encender un partido. Nosotros estamos para actuar con sentido común", indicó el sevillano tras el visionado de un video en el que un entrenador de Primera División tocaba en dos ocasiones el cuello de un auxiliar mientras éste abandonaba el área técnica; este técnico fue expulsado por la acción y sancionado con varios encuentros de suspensión.
"El sentido común es el arte de resolver los problemas, no de plantearlos", cocnluyó manifestando Medina Cantalejo ante un aforo que siguió con tras interés su alocución y que, posteriormente, particpó activamente en el debate.