La violencia de la Conquista española y el papel de las fortificaciones ponen fin a las jornadas ‘Arqueología del Conflicto’
El arqueólogo del grupo de investigación Tarha de la ULPGC, Jonathan Santana Cabrera, ofrece el día 15 de diciembre, a las 15.00 horas, la conferencia titulada ‘Morir bajo la espada extranjera: una víctima indígena de la conquista de Gran Canaria’, en el marco de las jornadas sobre Arqueología del Conflicto que concluyen en la Casa de Colón. Seguidamente, a las 18.00 horas, el arqueólogo Julio Cuenca, abordará en la última intervención del programa el papel de las fortificaciones de la ciudad de Las Palmas durante los siglos XVI y XVII.
El historiador y arqueólogo Santana Cabrera, cuya especialidad es el estudio de los restos óseos humanos y el análisis de las prácticas funerarias en las sociedades del pasado, se referirá en su conferencia al caso de un aborigen que murió a finales del siglo XV como consecuencia de las heridas ocasionadas por un ataque con espada, que pone de manifiesto la virulencia de la guerra de conquista de Gran Canaria”, señala el especialista al referirse a este “episodio de violencia interpersonal caracterizado por el ensañamiento donde, muy probablemente, participaron varios atacantes”.
Para el arqueólogo, que actualmente participa en varios proyectos de investigación en Canarias, Península Ibérica, Próximo Oriente y Mauricio, abarcando periodos históricos desde el Neolítico al siglo XIX, “la conquista de Gran Canaria puso fin a un largo proceso de contacto entre aborígenes y europeos que vino marcado por la guerra, la llegada de nuevos colonos, y la transformación de la sociedad indígena”.
Finalmente, el también arqueólogo Julio Cuenca, que dirige diferentes proyectos de investigación relacionados con el patrimonio arqueológico e histórico de Gran Canaria, entre ellos los proyectos de rehabilitación de las fortificaciones de Las Palmas de Gran Canaria, hablará de la fortificación de la ciudad entre los siglos XVI y XVII en un contexto en el que la urbe ocupa una situación estratégica privilegiada en el Océano Atlántico.
Según Cuenca “a partir de 1521, cuando se inicia la primera de las cinco guerras que librarán las dos grandes potencias del momento, España y Francia, y a lo largo de todo el siglo XVI, Canarias, apenas conocerá momentos de paz. Su situación estratégica en el Océano Atlántico, propició que sus ciudades más importantes fueran objeto de constantes ataques y saqueos, por parte de los enemigos del Imperio: franceses, ingleses y holandeses, entre los más importantes. Además la proximidad del Archipiélago al litoral africano, añadió un punto de vulnerabilidad a un territorio fragmentado y sin defensas para unas ciudades que habían sido fundadas en su mayor parte, a la orilla del mar”.
“En Gran Canaria de unos años a esta parte se han puesto en marcha iniciativas encaminadas a recuperar este valioso legado histórico. En concreto se trabaja en la rehabilitación de dos fortalezas emblemáticas y representativas de la defensa del Puerto y de la ciudad de Las Palmas: Las fortalezas de La Luz y Mata. Los dos proyectos llevaban aparejados estudios arqueológicos que han motivado importantes hallazgos relacionados con la evolución histórica de estas dos construcciones defensivas”, avanza el arqueólogo.
“Las excavaciones arqueológicas en el Castillo de La luz han puesto al descubrimiento los restos casi intactos de la fortaleza primigenia: La torre de Alonso de Fajardo y la barrera artillera que la ceñía alrededor. Ante la imposibilidad de resistir el impacto de la artillería naval, esta obra defensiva fue enterrada en arena y cubierta por otra obra defensiva levantada en 1563 que es la fortaleza que hoy conocemos. La historia de esta fortificación es apasionante pues sus murallas fueron testigos, entre otros, de los ataques de Drake y Van der Does entre 1595 y 1599”, dice.
“En Mata no solo se ha logrado recuperar el baluarte de los siglos XVII y XVIII obra de los ingeniero Prospero Casola y Miguel Hermosilla, sino también la Torre de San Francisco, hallada enterrada en el interior del Balaurte, única obra de fortificación que se conserva de la defensa norte de la ciudad de Las Palmas, que participó activamente en la defensa de la ciudad durante el asedio perpetrado por las tropas de Van der Does en 1599”, concluye.
La primera edición de estas jornadas está abierta al público (hasta completarse el aforo del salón de actos de la Casa de Colón). Además, las jornadas contemplan los días 17 y 18 de diciembre cuatro visitas guiadas gratuitas de una hora de duración al complejo defensivo de la Batería de San Juan y Mesa de San Juan, que serán dirigidas en horario de mañana (9.30 y 11.30 horas) por el arqueólogo Artemi Alejandro Medina. Para estas visitas el centenar de plazas dispuestas están ya cubiertas.
La Arqueología del Conflicto es una disciplina relativamente joven que centra su atención en los conflictos intra e intergrupales a lo largo de la historia. Nace en los países anglosajones a fines de los sesenta, como una necesidad social de dar respuestas a los recientes conflictos armados en los que se vio envuelto el Continente. Esta rama de la arqueología se presenta estrechamente relacionada con la arqueología de los campos de batalla, la arqueología militar, la arqueología de la represión política y los estudios de cultura material contemporánea.
Cabe reseñar que esta disciplina está tomando un creciente protagonismo en el panorama investigador español, debido a la multiplicación de los estudios arqueológicos realizados sobre restos materiales de la Guerra Civil Española y la posguerra.