Isabel Guerra, la portavoz de Nueva Canarias – Coalición canaria en el ayuntamiento de Teror afirma: “han convertido a Teror en el municipio donde más caro es vivir de toda Canarias, friendo a impuestos a nuestros vecinos y vecinas, para ellos vivir a cuerpo de rey”.

De Verdadero atropello, tacha la portavoz de NC-CC grupo municipal Isabel Guerra la confección de los presupuestos para el 2017, que sustenta sus actuaciones principalmente en la carga fiscal a los vecinos y vecinas de Teror.

La carga fiscal que soportan los vecinos y vecinas de Teror hace que nuestro municipio se convierta en uno de los lugares donde más caro es vivir de Canarias. Los impuestos directos suponen que nos colocamos en el municipio que supera en todos los impuestos las medias de Canarias.

Vivir en Teror, es más caro que vivir en cualquier parte de la isla. La presión fiscal por habitante es de 556 euros y la media de Canarias es de 528 euros. Los terorenses pagan como media 28 euros más por habitante en sus impuestos, la aportación que hacen los vecinos vía impuestos ( ingresos corriente ) supera a la media de Canarias, en 280 euros de más, así pues un vecino de Teror, paga 1.195 euros y la media está en 961 euros para toda Canarias. (datos del informe de auditoría de gestión y marco de equilibrio económico, ratificado en pleno de 28 de diciembre de este mismo año.)

Isabel Guerra afirma: “las cuentas saneadas del gobierno las paga el ciudadano con creces, sin recibir servicios adecuados a los grandes impuestos que paga. Los vecinos de Teror soportan más que nadie los impuestos del IBI y de vehículos, así pues, el ciudadano de Teror, paga más por recibir menos servicios, se da el caso que muchos vecinos y vecinas de Teror pagan tasas de alcantarillado sin tenerlo instalado, considerando esto desde nuestro punto de vista una verdadera estafa”. Precios sobredimensionados de actividades deportivas, precios desorbitados en el impuesto de sociedades, precios por pintar las fachadas de sus casas, por tasas de mercadillo, por agua, por alcantarillado, por exhumaciones, por nichos, por casarse, todos más elevados que en otros municipios, en Teror se paga todo para mantener a los señores del gobierno y sus acólitos”.

En que se van sus impuestos, en mantener un grupo de gobierno que supera el presupuesto para el 2017 en un 3%, con una cantidad de 542.256 euros.

En personal un 37% el presupuesto, mantener una plantilla con enchufados donde existen sentencias de la manera improcedente de contratar, a través de denuncias auspiciadas por el gobierno actual, han entrado por la puerta de atrás más de 46 personas, creando una plantilla sobredimensionada en algunas áreas y escasa en otras, mas responde al enchufismo político que a la prestación de servicios que los ciudadanos deben recibir.

A pesar del ingreso que supone aguas de Teror en 3.642.000 euros para este año, el gobierno sigue manteniendo el nivel de carga fiscal en los vecinos y vecinas de Teror, los impuestos de viviendas se siguen cobrando a precios de antes de la crisis, sabiendo que los valores de las viviendas han bajado. No ajustándose su cobro al precio de la vivienda del mercado. En cuanto al impuesto de vehículos otro escollo, nuestros impuestos superan también al de la gran mayoría de los municipios de Canarias, dándose el caso que aquí el vehículo no deja de pagar hasta que cumpla los 30 años, en lugar como hace otros municipios hasta los 25 años, cobrándonos 5 años de más por el vehículo y un 26% más que municipios colindantes, como Valleseco.

Donde se van nuestros presupuestos en encargar proyectos, estudios y trabajos técnicos y gastos jurídicos fuera del ayuntamiento, en lugar de hacerlo con personal propio.

NC- CC en el municipio de Teror califica el presupuesto del 2017, una nueva vuelta de tuerca del Gobierno municipal a los terorenses “es un verdadero zarpazo a los vecinos y vecinas de Teror” afirma Guerra. La carga fiscal que soportan los vecinos y vecinas es superior a la media de Canarias. La crisis la han pagado los vecinos y vecinas de Teror, para que sus gobernantes despilfarren sin miramientos, sabiendo que quien paga la fiesta es el ciudadano.

Los ciudadanos de Teror están hartos de pagar los dispendios del gobierno municipal y que estos no den respuestas a las múltiples demandas de servicios, llamase incremento de las ayudas de alimentos, incrementos de servicios comunitarios, incrementos de infraestructuras para nuestros mayores, alternativas de ocio a los jóvenes del municipio, fortalecimiento de la zona comercial, ayuda a los barrios más alejados, etc…